Colectivo Mujeres Medicina: “logramos algo muy importante, saber que no estamos solas”.

Entrevista a Florencia Benítez, referente del colectivo Mujeres Medicina.

miércoles 10 de marzo de 2021

Sobre finales del año 2019, un grupo de estudiantes de medicina comenzó a cuestionarse y preguntarse sobre el rol y el espacio que las mujeres ocupaban y representaban dentro de la Facultad de Medicina.

A raíz de estos cuestionamientos y la motivación de este grupo luego de asistir a un congreso de biociencias, en abril de 2020 se forma el colectivo Mujeres Medicina (MM).

Para conocer más en profundidad los objetivos y las características del mismo, conversamos con Florencia Benitez Yejas, Coordinadora del equipo de comunicación, integrante de la comisión de organización e integradora de comisiones de MM.

¿Cómo fue el origen del grupo, cómo surge y cuándo? 

Mujeres Medicina se funda a finales de abril del 2020, individualmente varias de nosotras ya nos cuestionábamos ciertas realidades de nuestra facultad o de nuestra profesión. Pero la motivación principal proviene de la asistencia al II Congreso de Biociencias 2019 de una de las integrantes del futuro colectivo en ese entonces. Allí se tocaron temas como la brecha de género en la ciencia, el techo de cristal,  la maternidad y el efecto tijera, expuestos por María Trinidad Herrero (primera mujer catedrática de Anatomía, directora del instituto universitario de investigación en envejecimiento y presidenta de la Real academia de medicina y cirugía de la universidad de Murcia)

Esta  información quedó resonando en el pensamiento de nuestra compañera y luego se transformó en un pensamiento colectivo que nos llevó a investigar sobre la composición por sexo de las cátedras de nuestra facultad, quienes eran las y los que ocupaban los cargos y empezamos a tomar nota. Cuantificamos los datos que habíamos recolectado y nos dimos cuenta que nuestra Universidad no es diferente a los ejemplos expuestos en aquel congreso. 

Poco a poco dejamos de ser 3, para ser 5, y ahí fuimos creciendo, organizándonos hasta crear el colectivo Mujeres Medicina que conocemos hoy. 

¿Cómo arrancaron a funcionar y cuáles fueron los primeros objetivos? 

Al inicio éramos menos de 10 mujeres, todas hacíamos un poco de todo, siempre con el propósito de darle visibilidad a la inequidad de género presente en el ámbito académico y hospitalario, esto nos sigue uniendo. Se puede decir que fue nuestro primer y principal objetivo. 

Pensamos que al poder visibilizar estas problemáticas se pueden llevar a cabo acciones para poder cumplir con nuestro objetivo mayor, que es disminuir, o erradicar por ser ambiciosas, la brecha existente entre nosotras y nuestros pares varones en el ejercicio de la profesión, así como durante el transcurso de la carrera. De este gran vamos surgen muchas ideas, que se transformaron en objetivos para el Colectivo, como la creación de un proyecto de guarderías y salas de lactancia, poder aportar a la mejora del accionar a la hora de hablar acoso/abuso a nivel de las facultades que abarcamos y poder generar lugares seguros para poder estar contenidas entre nosotras. 

¿A qué diagnóstico llegaron sobre el ámbito de las mujeres médicas y estudiantes de medicina?

Como colectivo con presencia social efectuamos una encuesta donde recibimos relatos que nos permitieron cuantificar las situaciones vividas por 1073 personas, 

Entre ellas se encontraban 861 estudiantes y 212 egresadas/os. El 88.6% de los encuestados se identificaba con el género femenino, un 11.3% como masculino y sólo un 0.1% como género fluído. En esta población se encontró que más del 30% asegura que sufrió acoso por parte de un docente y más del 40% asegura que su género fue influyente a la hora de elegir una especialidad o posgrado. 

Y un dato muy importante que rescatamos es que el 86.2% considera que denunciar sirve, pero el 64.9% considera que denunciar afecta negativamente en la carrera de la denunciante.

Con estas cifras queremos mostrar la vulnerabilidad que vivimos por parte de los protocolos, aún insuficientes, que se ejercen por parte de las instituciones. En los mecanismos de denuncia de acoso/abuso no están contemplados factores determinantes para la denunciante, consideramos que a pesar de que hubieron mejoras en el último tiempo, son insuficientes. 

El desarrollo de la carrera de la denunciante no pueden ni deben peligrar, y esto debe ser tenido en cuenta. 

También se valoraron datos cualitativos, donde el 49.2% consideran que los estereotipos de género están muy presentes en nuestra facultad donde resaltaron la maternidad, el rol de cuidados y la imposibilidad de la mujer al acceder a especialidades socialmente masculinizadas.

Como conclusión la vulnerabilidad la vivimos desde los protocolos insuficientes hasta la no contemplación de la maternidad de las estudiantes y egresadas, hay mucho camino para recorrer y muchas cosas donde trabajar, pero que las instituciones ya estén en conocimiento y alerta de nuestra realidad es un paso muy grande. 

¿Qué sienten que pudieron lograr con la iniciativa de agruparse? 

Creemos firmemente que ejercer el feminismo desde la militancia colectiva nos suma y suma a nuestra comunidad el sentido de unidad. Somos muchas mujeres con un mismo objetivo, trabajando para eso, lo que nos permite generar mayores redes y que el trabajo pueda abarcar muchas aristas. 

Además logramos algo muy importante y es saber que no estamos solas, logramos poder tener una gran contención entre nosotras, y esto me parece importante destacar porque no olvidemos que nosotras somos mujeres estudiantes y egresadas, que también vivimos situaciones donde la inequidad de género está muy presente. 

¿Cómo están trabajando hoy? 

El crecimiento del colectivo fue exponencial, tanto exteriormente como en la interna. Hoy más de 40 mujeres lo componen, organizadas en equipos y comisiones (comunicación, entrevistas, finanzas, datos e investigación y organización). El colectivo nació en pandemia, por lo tanto la virtualidad ha sido nuestro gran medio, en el nos manejamos y trabajamos, las videollamadas son nuestras aliadas. 

¿A qué apuntan y qué tipo de contención encontrarán las mujeres vinculadas a la medicina en este grupo?

Creemos que entre la comunidad de estudiantes y egresadas de las distintas carreras generamos un espacio seguro para que ellas se acerquen a hablar o a pedir ayuda, el término que usamos las feministas para referirnos a esto es sororidad, es decir, el hermanamiento entre nosotras. No siempre es sencillo hablarlo con un docente, justamente porque muchas veces a quién estás denunciando es a otro docente o alguien que tiene “poder”.

Además de eso logramos visibilizar desigualdades dentro de nuestra facultad a la cual muchas no eran conscientes. Al ser un grupo diverso de mujeres tenemos mucho para aportar, muchas aristas para trabajar, y eso es lo que más nos identifica. 

Nuestro norte es buscar la equidad de género, darle voz a las gurisas, poner todo lo que esté a nuestro alcance para ayudarlas y contenerlas, trabajar en conjunto con distintos servicios para estudiar cómo podríamos mejorar la situación en facultad/hospitales, promover la sororidad entre las compañeras, hablar de lo que pocos y pocas se animan hablar, lo más ambicioso que tenemos es el promover, no sólo dentro de la comunidad médica u hospitalaria sino dentro de la sociedad, políticas que podrían ser aplicadas para disminuir la brecha (maternidad, cuidados, adaptar cursos teniendo en cuenta que las estudiantes se embarazan, licencia paternidad obligatoria, democratizar las tareas de la casa, etc), también comenzamos con un proceso de democratizar el conocimiento entorno a nuestros cuerpos y nuestra salud ya que quienes nos acompañan no sólo son del ámbito de la salud, esto es impulsado por las médicas y estudiantes de parteras del colectivo que encontraron en nuestro blog un lugar donde brindar información. 

¿Cómo se pueden sumar las mujeres a esta iniciativa? 

Se pueden poner en contacto con nosotras por nuestras redes, en Instagram nos encuentran como @mujeresmedicina_ y en Twitter como @mujeresmedicin_, acá vamos a estar contándoles cómo nos manejamos y cómo se pueden sumar. 

Invitamos a todas aquellas mujeres que deseen trabajar o conocer nuestro trabajo a que se acerquen a nuestras redes sociales, también invitamos a aquellos y aquellas docentes que estén interesadas en escucharnos para trabajar en conjunto, para buscar así una medicina y una universidad con perspectiva de género.

El trabajo no puede y no debe ser sólo de nosotras, es necesario que todos los actores sociales se pongan a disposición para trabajar.