Día Mundial de la Salud hace foco en la diabetes

jueves 7 de abril de 2016

El jueves 7 de abril se conmemora el Día Mundial de la Salud en todo el mundo; la consigna de la Organización Mundial de la Salud está centrada en la diabetes. Unos 420 millones de personas en todo el mundo la padecen.

En ese sentido, la OMS insta a los países a «mejorar el acceso equitativo» y a poner en marcha políticas de lucha contra la diabetes.

El número de adultos que padecen diabetes se ha cuadruplicado desde 1980 hasta unos 422 millones en el mundo, debido sobre todo a la obesidad, señala un informe global de la OMS sobre esta enfermedad crónica.

«La diabetes progresa. Ya no es una enfermedad que predomine en los países ricos; aumenta sin parar en todas partes, de formas más pronunciada en los países con ingresos intermedios», afirma la directora general de la OMS, Margaret Chan, en el prólogo del informe.

A escala mundial, la OMS estima que 422 millones de adultos sufrían diabetes en 2014, en comparación con los 108 millones de 1980. Esta enfermedad afecta al 8,5% de los adultos, es decir dos veces más que en 1980, debido al aumento de los factores de riesgo, como el sobrepeso y la obesidad.

En 2012, la diabetes terminó con la vida de 1,5 millones de personas en el mundo, a lo que hay que añadir 2,2 millones de fallecidos a causa de enfermedades relacionadas con ella, o sea un total de 3,7 millones.

Más de la mitad de los diabéticos en el mundo vive en el sudeste asiático y en la región del Pacífico, donde los hábitos alimentarios han cambiado mucho en los últimos años.

En la región de las Américas, el porcentaje ha pasado de 5% en 1980 a 8,3% en 2014, es decir, de 18 millones a 62 millones de personas.

El estudio de la OMS afirma que la diabetes y sus complicaciones «conllevan importantes» pérdidas económicas para las personas que la padecen y sus familias, así como para los sistemas de salud y las economías nacionales por los costos médicos directos y la pérdida de trabajo y sueldos».

QUÉ ES LA DIABETES

Es una enfermedad crónica que se desencadena cuando el páncreas no produce suficiente insulina (una hormona que regula el nivel de azúcar en la sangre), o cuando el organismo no puede utilizar con eficacia la insulina que produce. Según la OMS, el acceso a la insulina, principal tratamiento contra la diabetes, es desigual en función de los países.

«Se dispone de insulina y de hipoglucemiantes orales de forma generalizada tan solo en la minoría de los países de bajos ingresos», denuncia. «Es más, en los países de ingresos bajos y medianos con frecuencia no se dispone de los medicamentos esenciales para controlar la diabetes», como los que bajan la presión arterial».

La organización pone de relieve «la enorme escala del problema», aunque afirma que el mismo se puede revertir. Para eso, insiste en la necesidad de «desalentar el consumo de alimentos malsanos, como los refrescos azucarados» y fomentar la práctica de actividad física regular.