Resistencia a los antimocrobianos: la “pandemia ignorada”.

jueves 18 de noviembre de 2021

Entre el 18 y el 24 de noviembre se celebra la “Semana mundial de concientización sobre el uso de antimicrobianos”, este año bajo la consigna “Corre la voz, frena la resistencia a los antimicrobianos”.

La resistencia a los antimicrobianos RAM es el fenómeno médico que implica que los tratamientos antimicrobianos -los antibióticos- ya no sean efectivos dado que las bacterias y otros microorganismos se vuelven resistentes a los mismos.

La RAM se manifiesta tanto nivel de infecciones comunitarias como a nivel intrahospitalario, según el Dr. Fabio Grill, médico especialista en Infectología y medicina intensiva “nos enfrentamos a una expansión cada vez mayor. En este contexto, la RAM es uno de los problemas sanitarios más graves que la salud pública debe afrontar en el futuro inmediato”.

Grill recuerda que hay un mundo antes y después del descubrimiento de los antimicrobianos. “Muchas de las infecciones que actualmente tienen escasa repercusión clínica, hace 100 años poseían un alto porcentaje de mortalidad relacionada. Basta indagar en la literatura médica de la pandemia de la gripe de 1918, donde hubo más 50 millones de fallecidos, un porcentaje muy alto, lo fueron por complicaciones infecciosas sin tratamiento posible”.

En la década de 1920 aparece el primer antibiótico, la penicilina. No fue hasta 1940 cuando se comenzó a usar a nivel clínico y esto generó una bisagra en la medicina.  Infecciones que eran mortales comenzaron a curarse con tratamientos de pocos días sin dejar ningún tipo de secuela.

Hoy sabemos que hay un antes y un después desde que se comenzaron a usar los antibióticos.

El especialista señaló que “los antimicrobianos tuvieron un impacto más allá de la medicina humana, ya que se favoreció el desarrollo de la medicina veterinaria y fundamentalmente la cadena productiva de alimentos.

Es tal el impacto de los antibióticos, que podríamos decir que es una de las medidas de salud pública más importantes en el desarrollo de la humanidad, junto con el agua potable y las vacunas.

Paradójicamente, “mientras se transitaba esta época dorada del antibiótico, también se comenzó a identificar bacterias resistentes a los antibióticos. Silenciosamente comenzó una etapa con un final de severas repercusiones, la era de la RAM” señaló el Dr. Fabio Grill.

Lo que no pudimos ver, y a pesar de la alerta del Dr. Fleming fue que mientras aparecían antibióticos en el arsenal terapéutico, se describían mecanismos de resistencia a los mismos. Estos mecanismos de resistencia inhabilitaban su uso clínico y en algunos casos, a los pocos años de su uso”.

Con preocupación Grill manifiesta que “paradójicamente el siglo XXI cuando tenemos la mejor calidad de la medicina en la historia de la humanidad, se comenzó a transitar la etapa de crisis antibiótica”.

«Los médicos en los hospitales comenzamos a ver infecciones sin posibilidad de tratamiento alguno. Hoy existen bacterias que hace 20 años eran sensibles a todos los antibióticos y hoy no tienen tratamiento posible, constituyéndose en cepas pan-resistentes” dijo. 

Grill afirma categóricamente que en pleno siglo XXI “estamos en las mismas condiciones que en los años previos a 1918 pero con pacientes más vulnerables y con una cadena productiva de alimentos comprometida por ello”.

Uno de los mayores desafíos con respecto a la RAM es la toma de conciencia por parte de la ciudadanía.

Es por ello que desde hace algunos años, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha puesto el tema sobre la mesa. En la 68ª Asamblea Mundial de la Salud (2015), los estados miembros aprobaron el “Plan Global de Acción para la contención de la Resistencia Antimicrobiana”, cono objetivo mejorar la conciencia y el entendimiento de la resistencia antimicrobiana.

“En forma muy conceptual y jerarquizando el problema, desde entonces se comenzó a hablar de One Health , ya que el fenómeno RAM debe ser encarado desde esa mirada multidisciplinar. Hoy sabemos que el problema y sus soluciones están en la medicina humana, la medicina veterinaria y cadenas productivas de alimentos, y el medio ambiente ya que hay un contacto íntimo entre ellas, y no es posible encarar la RAM sino hay políticas que involucren a todos los sectores simultáneamente” explicó Grill.

Mientras tanto en Uruguay, durante 2017 y 2018, un grupo de expertos del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y del Ministerio de Salud Pública (MSP) desarrollaron protocolos de acción sobre la RAM. Además, se presentó un esbozo de “plan nacional” de desarrollo futuro.  

Se prohibió el uso de colistina a nivel veterinario, ya que es un antimicrobiano denominado de uso crítico y muchas veces, es la única opción útil en infecciones en humanos.

Grill dijo que “la RAM se ha constituido como un problema global que requiere no solamente una estrategia nacional, sino colectiva mundial. Ya no podemos seguir mirando la RAM en forma compartimental, la salud humana, veterinaria medio ambiental es una sola y nos afecta directamente”.

El médico entiende que hay que “actuar ya”, tomando “medidas enérgicas para mitigar este problema entre las que se destacan la puesta en marcha de los protocolos de RAM nacional, con una gobernanza centralizada que coordine a todos los ministerios involucrados, grupos de científicos e investigadores, academia y sociedad civil”.