Organización Mundial de la Salud pide eliminar el mercurio de instrumentos médicos para 2020
Uruguay suscribió el viernes 11 junto a otros 140 países el convenio de Minamata de control del Mercurio, para reducir de forma drástica el uso de ese metal, perjudicial para la salud. En paralelo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) propuso la iniciativa “Salud libre de mercurio en 2020”.
“La OMS trabajará con los gobiernos para garantizar que cumplan sus obligaciones en virtud del convenio, especialmente en las áreas de salud”, manifestó a la prensa María Neira, directora de la OMS para Salud Pública y Medio Ambiente.
En la misma línea, el canciller Luis Almagro –quien representó a Uruguay en la reunión en Japón- manifestó que “el mercurio no observa fronteras nacionales; la contaminación aérea y a través de nuestras aguas internacionales nos llega a todos”.
El convenio sobre mercurio es el primer texto legalmente vinculante y fue negociado en Naciones Unidas bajo la presidencia uruguaya.
La nueva normativa significará, entre otras cosas, la eliminación de termómetros y tensiómetros de mercurio. Los servicios de salud son una de las principales fuentes de liberación de mercurio.
La exposición al metal puede causar graves problemas a la salud y es peligrosa para el desarrollo intrauterino y las primeras etapas de la vida, además de que puede ser tóxico para los sistemas nervioso e inmunitario, el aparato digestivo, la piel, los pulmones, riñones y ojos, según la OMS.
En los hechos, los termómetros de mercurio ya están discontinuados en Uruguay y de hecho este año, el Ministerio de Salud Pública emitió un instructivo para el manejo mercurio y residuos que lo contengan. Este tiene un apartado especial dedicado a los residuos odontológicos.