Día Mundial contra el cáncer infantil

Por Dr. Luis Ney Castillo, director médico de la Fundación Peluffo Giguens.

El 15 de febrero de cada año se conmemora en todo el mundo el Día internacional del cáncer infantil. Este día fue elegido por la Organización Internacional de Padres de Niños con Cáncer en setiembre del 2001, para realizar alrededor del mundo eventos conjuntos. Éstos tienen por finalidad reconocer el extraordinario desafío de vida que significa el cáncer en niños y adolescentes y sus familias.

En Uruguay, alrededor de 250 niños y adolescentes son diagnosticados cada año con cáncer y aproximadamente 80 de ellos fallece anualmente. Con tratamientos efectivos y aplicados prontamentela mayoría de esos pacientes pueden ser curados; lo cierto es que las estadísticas globales muestran una disparidad shoqueante.

En los países desarrollados se curan cerca del 80%, pero en los países sin recursos adecuados los porcentajes caen al 10-20%. En esos lugares las dificultades consisten en la falta de acceso a cuidados médicos adecuados, diagnósticos tardíos y/o tratamientos ineficientes.

Volviendo a Uruguay, hasta hace 25 años las tasas de curación globales no excedían al 50%, con desniveles importantes entre el área pública y la mutual y/o privada.Diagnosticada esta inequidad, un grupo entusiasta de médicos llevó adelante el emprendimiento de crear una Fundación con la finalidad de crear un Centro donde se brindara la mejor calidad de atención y se apoyara social y económicamente a los pacientes y sus familias.

El esfuerzo valió la pena y hoy, según la Organización Mundial de la Salud, Uruguay tiene la más baja tasa de mortalidad por cáncer por debajo de los 14 años de toda Latinoamérica y muy próxima a la de los países más desarrollados.Las diferencias de sobrevida debidas a inequidades sociales también desaparecieron.

Los desafíos continúan. Uruguay sigue teniendo en el debe curar más adolescentes mayores. La curación de esta franja de la población está por debajo de lo posible. Esto significa un alerta para nuestra organización sanitaria y un proyecto para ellos similar al implementado en los más chicos.Nuevos medicamentos, avances en la radioterapia y por tanto más desafíos esperan. De estar alertas y emprender esos desafíos depende el futuro de muchos de nuestros niños y adolescentes.Nuestrosmédicos lo están.

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