por Armando Olveira

Laboratorios nacionales: 73% del mercado

55 aniversario de ALN

El Comité Ejecutivo del Sindicato Médico del Uruguay recibió en su sesión del 30 de octubre a los principales ejecutivos de la Asociación de Laboratorios Nacionales (ALN) con motivo del
55 aniversario de esa institución.

En representación de la entidad que nuclea a 42 empresas del país estuvieron presentes, su titular, químico farmacéutico Enrique Birembaun, y el gerente general, Mario d’Alto.

El Dr. Juan Carlos Macedo, presidente del smu, subrayó que «es destacable la actividad de las empresas afiliadas a la ALN, ya que dan trabajo a tres mil personas y representan 55% del mercado farmacéutico uruguayo en valores y 73% en unidades vendidas. Tenemos la impresión de que estas cifras son mucho mejores que en otros mercados».

«Sólo en Brasil esta relación es superior a la uruguaya, con 85%. En los demás países la farmacéutica nacional no ocupa el sitio de relevancia que registra en nuestra tierra», dijo.

Macedo remarcó «la satisfacción que siente el Sindicato al recibir a directivos de la Asociación» para «agradecer todo el apoyo brindado a los médicos uruguayos y su Sindicato». Señaló que «es muy bueno compartir actividades con una institución que tiene entre sus objetivos principales el impulso de políticas tendientes a favorecer y mejorar el acceso a la salud de la población. Todo esto coincide totalmente con los principios del Sindicato Médico».

Por otra parte, sostuvo que «es significativo el aporte de la industria farmacéutica para los parámetros de nuestro país, con la implementación de plantas de elaboración que son casi todas nacionales. Este dato da una idea del capital invertido».

«Bajo un régimen económico cada vez más abierto, con menores aranceles, la importación es tentadora y permite un notable crecimiento de la producción y exportación de los medicamentos nacionales».

«Hace pocos días, en una visita al Laboratorio Roemmers, supimos que la firma exporta 40% de toda su producción a países de América Latina», sentenció.

Según la Dra. Silvya Durán «es reconfortante comprobar la solidez que ha adquirido la industria farmacéutica nacional. El hecho queda demostrado con la compra de plantas multinacionales que se están yendo. Por suerte, las nacionales se quedan y sustituyen a las extranjeras con excelente calidad y organización».

«La industria nacional es imprescindible»

El presidente de ALN, químico farmacéutico En-rique Birembaun, complementó el aporte de Macedo, al señalar que «no solamente Roemmers exporta, sino también otras empresas, en algunos casos pequeñas».

Birembaun subrayó que sentía «verdadero orgullo por el reconocimiento recibido en el seno de una entidad tan importante por su jerarquía dentro de la profesión médica... Los laboratorios se sienten, con verdadero fundamento, colaboradores directos de la ciencia médica; no solamente en lo comercial e industrial sino también en lo profesional y académico. Nuestra aspiración es hacer las cosas cada vez mejor y hacerlas juntos».

El gerente de la entidad, Mario d’Alto, anotó que «en esta mesa [del Ejecutivo] los extremos se tocan. La industria vende 73% de unidades, pero es más aún si tenemos en cuenta que en el total hay una buena cantidad de productos no populares. Ese 73% es consecuencia directa de recetas que firman los médicos».

Para d’Alto «ésta es una gran demostración de la confianza mutua que se ha ido ganando en nuestra relación durante muchos años de trabajo consciente dentro del gremio médico».

«Sin una industria farmacéutica propia, no habría trabajo para tres mil personas y para la mayoría de los uruguayos sería imposible el acceso a los últimos avances terapéuticos. La idea de los laboratorios nacionales es ser altamente competitivos para permitir que los uruguayos tengan acceso a los más modernos medicamentos a un precio acorde con la realidad económica», dijo d’Alto

Asimismo defendió con énfasis la vigencia de la farmacéutica nacional: «Tras muchos años de esfuerzo hemos adquirido experiencia, se consolidaron equipos humanos y mejoró la calidad de máquinas e instrumentos. El sector es una realidad irreversible y es impensable su retroceso o desaparición, pues ello provocaría una absoluta dependencia del exterior y el costo de los medicamentos crecería comprometiendo aún más la existencia del sistema nacional de salud».

Por último, Birembaun agradeció la distinción y se congratuló de que «el cuerpo médico haya organizado una reunión sin protocolos, entre amigos, para celebrar 55 años de tarea conjunta. La meta final de ALN es trabajar por la salud de la población. Aunque las rutas pueden ser distintas, el destino siempre es el mismo: la salud».

Macedo concluyó la parte oratoria señalando: «Efectivamente, podemos decir con orgullo que nuestro país cuenta con una industria farmacéutica nacional, a la que hay que apoyar, promover y defender, porque de ello depende mucha más gente de lo que se piensa».

El acto fue cerrado con la entrega de una plaqueta recordatoria del Sindicato Médico a la Asociación de Laboratorios Nacionales.