lunes 15 de junio de 2020
Introducción
El pasado 24 de marzo de 2020, el Sindicato Médico del Uruguay puso a disposición de médicas y médicos una línea de teléfono mediante la cual, los equipos de salud pueden denunciar situaciones de falta de equipos de protección personal (EPP), mala utilización y otros problemas vinculados al acceso de los mismos.
El objetivo de esta medida fue dar rápida respuesta a estas situaciones ya que se reciben diariamente denuncias y notificaciones sobre la ausencia de disponibilidad o inadecuada calidad de los EPP para evitar la dispersión de SARS Cov 2 entre el personal de salud y las personas que se asisten en los distintos prestadores.
A partir de estas denuncias y notificaciones recibidas en la línea telefónica y de las experiencias relatadas por médicas y médicos que participaban asiduamente en Comité de Emergencia Sanitaria del SMU, surgió la necesidad de hacer una encuesta más amplia y sistematizada para obtener información de los profesionales que trabajan los distintos niveles, realizando un relevamiento sobre la disponibilidad y utilización de EPP.
Los resultados de esta encuesta son un insumo fundamental para conducir las gestiones pertinentes con los prestadores y las autoridades del Ministerio de Salud que fueran necesarias.
La encuesta
Entre el 4 al 14 de mayo se realizó la consulta por medio de un formulario de Google, que fue difundido por redes sociales, en el sitio web del SMU y entre las distintas sociedades científicas que forman parte del comité de emergencia sanitaria del gremio.
Estuvo conformada por 17 preguntas, la mayoría de respuesta cerrada, siendo las 2 últimas de carácter abierto para detectar dificultades no contempladas en el formulario.
La llegada por redes fue a 36.589 personas y fue 1560 veces clickeada.
Un total de 727 personas respondieron el formulario dentro del período estipulado, dejando en la mayoría de los casos (76%) su nombre y datos de contacto.
Resultados
- Características de la población que respondió la encuesta.
54% de las personas tienen 45 años o menos, la gran mayoría de quienes respondieron fueron mujeres (75%).

El 60 % de los encuestados trabaja en 1 o 2 lugares, 21% y 39% respectivamente.

En cuanto al ámbito donde se desarrolla el trabajo el 60% se auto referenció en prestadores del sector de las EEMM, IAMC o seguros y 40% en ASSE y (incluye una pequeña proporción de 4% en sanidades militar y policial, intendencias y Hospital de Clínicas).
213 respuestas corresponden e medicas/os del interior del país, lo cual significa un 29% del total.

En cuanto al trabajo con personas con COVID sospechoso o confirmado, el 77% de los participantes refiere que trabaja con pacientes con posible COVID, pero solo un 30% del total trabaja en un área destinada a personas con COVID confirmado.

- Disponibilidad y acceso al EPP adecuado
En cuanto a la formación específica en el uso de EPP un 54% de las personas refieren haber recibido formación por medio de video o clases a distancia, mientras que solo un 19% la recibió de forma presencial. Y un 11 % refiere que la formación fue a través de material impreso, gráficos o infografías.

Si tomamos en cuenta solo la población que refiere que trabaja en áreas destinadas a la asistencia de COVID (220 personas), la proporción de quienes recibieron entrenamiento presencial es de 25% y por video y a distancia es 50%, siendo estas cifras similares a las anteriormente mencionadas en los totales.
En cuanto a la autopercepción de seguridad sobre la formación en EPP entre los encuestados, observamos que la mitad se siente seguro mientras que la otra mitad presenta dudas sobre sus conocimientos.

Asimismo, se reparte en mitades la percepción de conocimiento y seguridad que otorga el protocolo de EPP de la institución donde se desempeña.
Si analizamos estos ítems en las distintas sub poblaciones IAMC/EEMM, ASSE, o Montevideo Interior, área COVID o no COVID, no se encuentran claras diferencias.
La mascarilla quirúrgica es el elemento de mayor disponibilidad, seguida por los demás elementos de protección facial y sobre túnicas, si bien estos últimos llamativamente se reportan como disponibles en el entorno de la mitad de los casos (40-60%).

Cuando analizamos las respuestas a las preguntas abiertas de la encuesta: En cuanto a la disponibilidad del EPP, ¿cuál es la mayor dificultad?, obtenemos una gran cantidad de respuestas vinculadas a la cantidad y disponibilidad real (es decir que los elementos adecuados estén en el sitio de atención de los pacientes). Especialmente se hace referencia a la disponibilidad de mascarillas de alta densidad (N95) y a la calidad en general de todos estos elementos.
Además se destaca en un gran número de respuestas, la necesidad de mayor formación y entrenamiento en la correcta utilización de todos los elementos del EPP.
Conclusiones:
La conclusión más importante de este trabajo es que existen dificultades en cuanto a la disponibilidad y adecuada utilización de EPP en Uruguay.
Dentro de estas dificultades, se destacan la falta de insumos adecuados (mascaras de alta densidad, sobretúnicas etc.) y la calidad dudosa de algunos de ellos.
Asimismo, los resultados muestran que es necesario intensificar la divulgación de protocolos de actuación en cuanto a EPP y la formación de los médicos con entrenamientos de calidad tanto presencial como virtual.